Hemos comenzado un nuevo año y esto da pie a querer hacer nuevos cambios. Algunas personas deciden renovar guardarropa, hacer un cambio de “Look” e incluso hasta cambio de pareja, pero si eres de las personas que comienza el cambio desde su hogar, entonces esta publicación es para ti.
Si estás pensando en pintar las paredes de tu casa, pero aún no decides qué color elegir, hoy te diré el significado de los colores y que efecto tienen en las personas que viven en tu hogar.
Antes que nada, debes saber que los colores se dividen en:

Los colores cálidos son el Amarillo, rojo y naranja y así como sus derivados son colores estimulantes, lo cual dará la sensación de un hogar alegre, vibrante con una sensación de paz y tranquilidad en tu hogar, pero ojo… estos tonos hacen que un espacio se pueda sentir más pequeño.

Por otro lado, los colores fríos como el azul, verde y violeta ayudan a dar una apariencia de retroceso, es decir, hacen que parezca que las cosas se encuentran más lejos de lo que están, por esta razón funcionan muy bien en habitaciones pequeñas, ya que le dan al espacio la sensación de ser más amplio de lo que realmente es; Estos tonos se pueden utilizar para hacer que un techo bajo parezca más alto.
Significado de los colores según la psicología:

Rojo:
Es alegre y puede ocasionar excitación. Por esta razón es recomendado usarlo con moderación ya que da mucha energía, pero en exceso puede que resulte violento. Evita usarlo en la cocina y en los dormitorios. En tonos tierra resulta un poco más cálido el ambiente.

Naranja:
Este color puede traer mucha energía y vitalidad a tu hogar, pero se recomienda usar un tono salmón para que las paredes no luzcan muy saturadas.


Amarillo:
El Amarillo también atrae vitalidad a tu hogar e incluso un poco de fuerza. Se recomienda usarlo en estudios o salas donde quieras que fluya tu creatividad, también ayudará a darle mucha energía a habitaciones que son oscuras o pequeñas.


Verde:
Refleja mucha tranquilidad y frescura, pero en un tono intenso puede ser más energético. Se dice que es el color de la abundancia y traerá dinero a tu hogar, pero utiliza tonos moderados como el olivo o tonos pastel para tu recámara o sala.


Azul oscuro:
Este tono expresa mucha calma, por lo que es ideal para utilizarlo en las habitaciones donde desees llegar a relajarte. Lo malo de este color es que hace que los espacios luzcan más pequeños, pero si no quieres pintar las paredes con este color, puedes agregar accesorios que complementen la decoración.


Azul claro:
Este tono es mucho más fácil de usar ya que refleja mucha tranquilidad, quietud y armonía. Lo malo: es un poco difícil de combinar, pero el blanco es una gran opción.


Morado:
Si eres fan del color morado, lamento decirte que no es el color más recomendable para pintar las paredes de tu casa. Este color produce tristeza, y misterio.


Lila:
A diferencia del morado, el color lila puede llegar a ser menos conflictivo, de hecho ayuda a evitar los problemas de pareja. Si quieres sacar una parte espiritual de ti, agrégalo en pasillos que conecten distintas habitaciones de tu casa o entre cuarto y baño.


Rosa:
Los tonos rosas evocan ternura y tranquilidad, pero al igual que el azul celeste, es un poco difícil de combinar, sobre todo si vives con tu pareja. Los cuartos de niños son perfectos para agregar este color y darles calma.
Los colores como el blanco, negro, gris y otros neutrales pueden funcionar bien en un esquema de color fresco, y dependiendo de los matices del color, estos colores neutros pueden parecer calientes o fríos.
Combina como quieras los colores y experimenta. Lo importante es que te sientas a gusto en tu hogar.