El pasado domingo todo parecía un día normal, soleado y muy caluroso, pero… ¡Oh sorpresa! Se nubló y cayó una lluvia muy rica, de verdad ya hacía falta volver a sentir ese aire húmedo.
Quizá a muchos no les gusta la lluvia, sin embargo, es algo que puedes disfrutar muy a fondo, esos pequeños detalles que nos regala la naturaleza, y no sólo la incomodidad de que te agarre en la calle.

A muchos les gusta la lluvia, pero no cuando les agarra en el camino al trabajo o a casa, te decimos algunas cosas maravillosas que puedes gozar en esta bella temporada.
-El olor a tierra mojada
El olor a tierra mojada nos trae una sensación de tranquilidad, serenidad y suele ser muy acogedor cuando te encuentras en tu hogar y abres un poco tu puerta o ventana, te invitamos a disfrutar de éste bello aroma.
-El arrullo de las gotas por la noche
Quizá hayas tenido un día muy pesado y estás por irte a dormir, está lloviendo, ufff, algo de verdad muy placentero es dormir con el sonido de la lluvia caer, te hará dormir mucho mejor y al otro día amanecerás muy bien descansado.
-Cuando llueve y el Sol se asoma a la vez
De momento se suelta la lluvia, de repente comienza a cambiar, una luz dorada sale, y ufff, el arcoíris acompaña este bello momento, de verdad es una obra de arte de la madre naturaleza.
-El sonido después de la lluvia

Es de noche, acabó de llover, los grillos cantan y tú calle luce muy tranquila, un ambiente sereno y de momento se oyen los coches pasar arrastrando el agua que queda en la acera, los tubos aún escurren de las azoteas, una sensación de protección en tu propio hogar.
-El baño después de mojarse
Estabas en la uni y vas rumbo a casa, y ¡zaz! te cayó la lluvia encima y todavía queda un tramo enorme que recorrer para llegar, pero al fin llegas a tu hogar y no te queda de otra que cambiarse lo antes posible y tomar un baño bien calientito, y después tomarte un cafecito, sobarte los pies cansados, acostarte y al fin descansar.
-Sentir el viento
Acabó la llovizna, y sales un rato a caminar, se siente tan rico ese ambiente húmedo y un equilibrio perfecto, no hay calor ni frío, y ese viento que sopla el cielo, que toca tu cabello, tu rostro y hace que tu cardigan vuele, ese olor de la tierra, el olor del pan recién horneado de la panadería, personas yendo y viniendo, los árboles acompañándote en cada trayecto, de verdad algo para disfrutar.
-En tu casa

Afortunadamente la lluvia te agarró en casa, qué mejor para escuchar música tranquila, relajarse, beberse un café o chocolate y unas galletas, dormir, abrazar a tu perro, a tu novio o novia, o solo apreciar la lluvia desde la ventana.
¿Tienes alguna otra idea de cómo disfrutar los días lluviosos? ¡Cuéntanos!